viernes, 30 de noviembre de 2012

Cuento con títeres "El pato y la muerte"

Hola, hoy os dejo un video sobre este cuento contado con títeres. Para mí fue un sueño cumplido el poder contarlo porque ya sabemos que en nuestra cultura no queremos aceptar el hecho de que sencillamente vivimos y desaparecemos. 
André Compte-Sponville, el filósofo francés vivo más importante, que me fascina y que, por cierto, hace referencias constantes a su infancia con una madre depresiva que se suicidó, en la entrevista promocional de su último libro "Ni el sexo ni la muerte. Tres ensayos sobre el amor y la sexualidad" (http://cultura.elpais.com/cultura/2012/11/23/actualidad/1353670784_257749.html) dice "Según mi punto de vista es mayor la sabiduría del que acepta su finitud, su propia mortalidad, que del que intenta tranquilizarse a buen precio, imaginando que después de la muerte existe otra vida que no acabará nunca." Yo siento lo mismo. 

Y por ello me gusta tratar el tema de la muerte. Hacía tiempo que quería contar este cuento a niños, pero dónde, a quién, cuándo, me preguntaba, y las dudas se apoderaban de mí y me paralizaban. Hasta que encontré el foro, el lugar y el momento. Había muchos niños, entre 2 y 11 años. Después del cuento charlamos un rato. Un niño me preguntó si se había muerto el pato y me resultó difícil contestarle pero al final lo admití que sí que había muerto. Otro habló de sus abuelos a los que no había conocido. Y así creamos entre los niños y yo un espacio sobre esta realidad y este misterio. 
Muchas gracias a tod@s ell@s desde aquí.



miércoles, 28 de noviembre de 2012

Comunicación parental


El tema de la comunicación es un tema fundamental en la relación con l@s niñ@s.
Y que poca importancia se le da en España a este tema en general. Lo he visto en mis trabajos como mediadora en centros escolares e institutos. Lo he visto en las familias, cuando un padre te dice "¿y qué le cuento?". Lo vemos en las reuniones de vecinos, de asociaciones, en nuestros políticos.
En los centros escolares los conflictos se concentran en los recreos, el de mediodía y sobre todo el del comedor. Y l@s niñ@s si no tienen la confianza acaban por no acudir a nadie y manejar el conflicto como pueden. Esta confianza sólo es posible si el niño (voy a hablar a partir de ahora en masculino porque realmente resulta agotador y me siento hasta ridícula pero está claro que me refiero a niña o niño) sabe que cuando acuda a un mayor (profe o cuidador) va a ser escuchado y a recibir una respuesta a su demanda. Si en lugar de eso el adulto le dice que deje de llorar, hombre, que los chicos no lloran (esto lo he visto yo) o que se deje de tabarras y siga jugando o que el profe no va a hacer nada entonces ese niño dejará de acudir. También he visto que cuando ellos saben que el mayor va a actuar acuden a él tantas veces como sea necesario. Y que sienten que merece la pena.


¿Y con los hijos? Con los hijos idem de idem. Si nunca tenemos tiempo para ellos, si no jugamos con ellos, si no les contamos cuentos, si no les decimos como nos sentimos, si no les confiamos nuestras historias de vida, ¿cómo lo van a hacer ellos? Si suelen recibir un no por respuesta acabaran por no pedirnos ya nada, ni que juguemos con ellos. Es decir, el impulso acabará por no darse. Es una ley del aprendizaje. En los bebes que nacen con alguna discapacidad es muy importante que los padres aprendan a interpretar sus señales de comunicación porque si el bebé no recibe una respuesta a su sonido, movimiento o gesto, dejará de hacerla y, por tanto, el espectro comunicativo se empobrecerá. Con los niños que tienen todas sus capacidades intactas pasa lo mismo. Por ello es muy importante que los padres demos respuesta a las demandas comunicativas de nuestro niño. Quiero señalar que la comunicación es un proceso complejo y multidimensional: está lo que digo, cómo lo digo, que gesto empleo al decirlo, cómo le ha llegado al otro. Los bebés se guían sobre todo por el volumen de nuestra voz, por nuestra cara, por el contacto físico que les damos. Aquí el contenido de las palabras no es importante aún. Todo lo demás constituye el 100% del mensaje para él. Y poco a poco el significado de las palabras va cobrando valor. Pero siempre, siempre, la parte del mensaje que no es estrictamente verbal es la que antes llega ¿o no?. Es más, si hay contradicción entre lo que digo y lo que mi cuerpo dice, esto último será el mensaje más importante para el receptor (hay multitud de estudios que asi lo demuestran). Quiero decir con esto que ¡¡¡atención padres y madres!!! con vuestra comunicación no verbal o corporal, que constituye un 70% de lo que decís a vuestros niños. Es más difícil ser consciente de este nivel de comunicación pero hay técnicas que nos ayudan como son todas las técnicas psicocorporales como la bioenergética o el movimiento expresivo o la respiración. Para empezar podéis dejaros guiar por vuestros hijos: ¿a qué muchas veces habéis sentido que vuestro hijo os había leído la mente a pesar de haberle dicho otra cosa muy diferente? Ahí está su feedback que puede ayudarte a mejorar como padre o madre. 
Para terminar deciros que me encantaría recibir vuestros comentarios a este tema. Un saludo invernal.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Como funciona la terapia infantil con juego


Cuando un niño o niña es traído a consulta, por alguno de sus padres generalmente, lo 1º que necesito hacer como psicóloga es ganarme su confianza: que se sienta aceptado, escuchado, apreciado por quién es y no por lo que hace o por cómo lo hace. Para ello desde el primer momento juego con él. El juego es importantísimo para los niños, es su forma de explorar el mundo, de comprenderlo, de ensayar lo aprendido. El juego para el niño es básico, es su lenguaje natural, y por eso es preciso usar el juego en terapia para niños.
A través de su juego puedo observar sus patrones comportamentales: la forma en que juega, el contenido del juego, su tolerancia al fracaso, las emociones que surgen, su aceptación de las normas, cómo es el contacto que hace conmigo, cómo funciona su cuerpo, que mensajes está mandando. A medida que jugamos vamos construyendo la confianza y el niño comienza a sentirse seguro con esa señora al que le han llevado y que no ha entendido muy bien quien es pero que parece dispuesta a conocerlo y aceptarlo tal y como es. Cuando un niño llega a terapia suele tener una imagen de si mismo muy devaluada precisamente porque no para de recibir feedback por su mal o extraño comportamiento o por bajo rendimiento escolar. Este clima de confianza en la consulta junto con los juegos, permiten al niño abrir las ventanas de su mundo interior y así, como psicóloga, puedo saber que siente, cuáles son sus temores, ansiedades o frustaciones. El niño tiene la oportunidad de ventilar y manejar sus emociones desde una nueva perspectiva sana e integradora.
Con los más pequeños (hasta los 6 años), tan sólo jugando en la consulta, suelen verse mejorías en poquísimas sesiones (3-4) y no es necesario verbalizar ni explicar nada del contenido simbólico sino mantener la presencia atenta y empática a lo que vaya surgiendo en el juego. Con los niños a partir de los 6-7 la terapia contiene más elementos que potencian la toma de conciencia del niño sobre sus emociones, sentimientos, pensamientos y acciones.
Mi especialidad con los juegos está centrada en la terapia con teatro de guiñol debido a mi comienzo profesional, hace más de 20 años, en el mundo del teatro. Desde principios del siglo XX teóricos procedentes de distintos ámbitos han investigado y utilizado títeres como vehículo de expresión y transferencia. Tienen un rol propiciador de aprendizajes significativos y de acciones transformadoras de la subjetividad. Así que generalmente cuando un niño llega nuevo a la consulta siempre jugamos al teatro de títeres. A través de los títeres sintonizo con aspectos que no salen en la comunicación tradicional persona a persona, sino que aparecen en un diálogo que va de "imaginación a imaginación". Utilizo un amplio conjunto de títeres artesanales donde se encuentran los arquetipos de los cuentos tradicionales como la princesa, el rey, el lobo, el médico, la niña, el niño, el pirata, la abuela, la sirena, etc. También usamos requisitos, objetos de la vida diaria y de los cuentos para jugar al teatro. Con telas y materiales de la naturaleza los niños hacen sus escenarios en un plis-plas, inventan sus historias, buscan un título y me indican lo que quieren que yo haga. Es un proceso dinámico donde el niño es la parte activa y yo le acompaño en sus necesidades e impulsos desentrañando lo que le afecta y llegando a la fuente de su malestar. Así en consulta el niño tiene la oportunidad de probar otras formas de solucionar los conflictos de su vida. A lo largo de la terapia el niño realiza sus propios títeres que tendrán que ver con su historia personal y que llevará consigo a casa como un símbolo del proceso curativo que ha tenido lugar durante la terapia.


viernes, 16 de noviembre de 2012

¿Medicamentos para los niños?

España es el 3er país que más medica a los niños en el mundo. La industria farmacéutica es la 3ª del mundo después del armamento y del narcotráfico. Os dejo este video que habla sobre la medicación en los niños, en concreto en los TDAH.
http://vimeo.com/52442343

martes, 13 de noviembre de 2012

El aprendizaje de las emociones

En el aprendizaje de las emociones hay dos períodos fundamentales que son los primeros años de vida y la infancia, hasta los 12 años. Las primeras experiencias, el vínculo entre los cuidadores principales y el bebé,  van a ir determinando nuestro posterior comportamiento emocional. 

Un padre me contó que no sabía que hacer cuando su hija mayor, de unos dos años y medio, iba a él y lo pegaba. Parece que la niña tenía este tipo de reacciones desde que había nacido su hermana hace cuatro meses. La niña necesita el límite que sus padres deben ponerle para que la pequeña pueda seguir desarrollándose con seguridad. 

En consulta los niños encuentran un espacio seguro y protegido para poder manifestar sus emociones contenidas. Cuando pido a un niño que haga un dibujo o que realice una escena en la caja de arena o que elija tres objetos para hacer un teatro estoy facilitando la expresión de su mundo interior, de lo que siente. A los más pequeños (hasta los 6 años) el juego les sirve para formular y asimilar lo que experimentan pero que no pueden aún expresar con el lenguaje. Con los mayores el juego es una dinámica ideal para expresar y tomar conciencia de lo que les oprime y este paso ya es liberador y sanador y el primero de la solución.

La madre de M. (niño de 8 años) me contó en la 1ª entrevista que su hijo no contaba nada de lo que le pasaba y que a veces le dolía el pecho y comenzaba a tener sofocos. Padecía asma y varias alergias. M. vivía en un ambiente muy estresante para él. Su primer teatro en consulta se tituló "La mansión del miedo". A lo largo de las sesiones la madre fue viendo como el niño iba abriéndose e iba mejorando en casa, en la escuela y en su sintomatología asmática. Darle la oportunidad de expresarse era una necesidad para M.

Por último comentaros que en el programa 130 de Redes http://www.rtve.es/television/redes/ que emitieron el 28 de octubre hablaron sobre la importancia del aprendizaje de las emociones. 

Un abrazo, feliz semana y jugad todo lo que podáis. 


lunes, 5 de noviembre de 2012

Como afrontar el tema de la muerte con los niños

La muerte es un paso seguro para todos/as. Pero, culturalmente, es un tema tabú. Naturalizar esta realidad es la mejor forma de aceptarlo para así poder vivir con más sentido, bienestar y plenitud. Los adultos somos los que trasladamos a nuestros niños los significados de las cosas y de los acontecimientos. Es seguro que tu hijo/a te formulará en algún momento las grandes preguntas de la vida. En relación a la muerte:

  • Habla naturalmente sobre ello, sin evitar palabras como muerte, entierro, cementerio.
  • Aprovecha las oportunidades que te brinda la vida día a día, como que tu hijo/a vea y señale un animal o una planta muerta. 
  • Trata siempre de contestar con naturalidad, tranquilidad y sinceridad. De esta forma le darás seguridad a él/ella.
  • Si te ha sentido dispuesta/o anteriormente a hablar sobre el tema, es muy probable que tu hijo/a te pregunte varias ocasiones: sonríe y muéstrate abierta/o y paciente a volver a hablar sobre ello.
  • También puedes reconocer tus dificultades a hablar sobre la muerte si es que así lo sientes, o si la demanda del niño/a es excesiva en cuanto a recibir respuestas muy concretas. Al fin y al cabo la muerte es un misterio independientemente de las creencias personales.
  • Puedes dar la visión de que la muerte forma parte de la vida, que sin ella, ésta tampoco existiría y que, es más, le da sentido a la vida aunque nos duela perder a los seres queridos y aceptar nuestra propia muerte.
  • Si en el curso de la conversación, la emoción aflora, daros el permiso de sentirla y así estarás transmitiendo a tu hijo/a que la tristeza es una emoción natural y normal en la vida y que es bueno expresar si se siente y así os estaréis dando la oportunidad de acompañaros en ella. 
  • Es importante darle seguridad al niño/a con el contacto físico, con la mirada, con el gesto y con el humor. Y pasar a otra cosa mariposa cuando se note que la conversación ha terminado.